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SEGURIDAD
presión de los neumáticos siempre debe
establecerse basándose en la presión de
inflado en frío. Esto se define como la presión
del neumático después de estar el vehículo
detenido durante al menos tres horas, o
después de haber conducido menos de 1,6 km
(1 milla) después de un período de tres horas.
La presión de inflado de los neumáticos en frío
no debe ser superior a la presión máxima de
inflado moldeada en la pared del neumático. La
presión de los neumáticos también aumenta
con la conducción del vehículo; esto es normal
y no se deben hacer ajustes para este aumento
de presión.
Consulte Ú página 482 sobre cómo inflar
correctamente los neumáticos del vehículo.
El TPMS le advertirá al conductor que hay una
presión de neumático baja si la presión del
neumático cae por debajo del límite de
advertencia de baja presión por algún motivo,
incluyendo los efectos de una temperatura baja
o la pérdida natural de presión a través del
neumático.
El TPMS seguirá advirtiendo al conductor de la
presión baja siempre que exista la condición, y
no dejará de hacerlo hasta que la presión de los
neumáticos se encuentre en la presión en frío
recomendada en la etiqueta, o por encima de la
misma. Una vez que se enciende la luz de
advertencia de TPMS, debe aumentar la
presión de los neumáticos a la presión en frío
recomendada en la etiqueta para que la luz de
advertencia de TPMS se apague. El sistema se
actualizará automáticamente y la luz indicadora
de TPMS se apagará cuando el sistema reciba
la presión actualizada de los neumáticos. Para
que el TPMS reciba esta información, es posible
que el vehículo deba conducirse durante
20 minutos a más de 24 km/h (15 mph).
NOTA:
Al llenar neumáticos calientes, es posible que
sea necesario aumentar la presión hasta
28 kPa (4 psi) adicionales por encima de la
presión de inflado en frío recomendada, con el
fin de apagar la luz de advertencia del TPMS.
Por ejemplo, su vehículo puede tener una
presión recomendada de los neumáticos en frío
(estacionado durante más de tres horas) de
207 kPa (30 psi). Si la temperatura ambiente es
de 20° C (68° F) y la presión medida de los
neumáticos es de 27 psi (186 kPa), una
disminución de temperatura hasta -7° C (20° F)
disminuirá la presión de los neumáticos hasta
aproximadamente 158 kPa (23 psi). Esta
presión de los neumáticos es lo suficientemente
baja para encender la luz de advertencia del
TPMS. Conducir el vehículo puede hacer que la
presión de los neumáticos suba a
aproximadamente 186 kPa (27 psi), pero la luz
de advertencia del TPMS seguirá encendida. En
esta situación, la luz de advertencia del TPMS
solo se apaga después de inflar los neumáticos
al valor de la presión en frío recomendada para
el vehículo en la etiqueta.
¡PRECAUCIÓN!
El sistema de monitoreo de presión de los
neumáticos (TPMS) está optimizado para
los neumáticos y ruedas originales. Las
presiones y advertencias del sistema de
monitoreo de presión de los neumáticos
(TPMS) están establecidas para el tamaño
de neumáticos proporcionados con su vehí-
culo. El uso de equipos de reemplazo que
no sean del mismo tamaño, tipo o estilo
puede resultar en un funcionamiento inde-
seable del sistema o daño a los sensores.
Los neumáticos obtenidos en el mercado
externo de piezas pueden dañar los
sensores.
(Continuación)