Al final de este primer arranque en funcionamiento, con la motobomba parada y en condiciones de seguridad, habrá que
realizar las siguientes comprobaciones:
Comprobar que no haya pérdidas en los circuitos de agua, aceite y carburante.
Comprobar los niveles de aceite y agua y, si es necesario, rellenar.
Comprobar que ningún perno esté aflojado.
6.
MANTENIMIENTO
6.1
Mantenimiento ordinario
Para que la motobomba funcione correctamente en el tiempo, conservando unas buenas prestaciones, es necesario respetar
escrupulosamente las prescripciones de mantenimiento previstas por el fabricante. El mantenimiento tiene que ser realizado
siempre por técnicos especializados dotados de herramienta adecuada.
Aconsejamos comprobar "al menos" cada mes el correcto funcionamiento de la motobomba, especialmente la forma en que
arranca y la intervención del dispositivo de arranque automático.
Es buena norma comprobar también la situación general de la instalación.
Referirse a LEYES, REGLAMENTOS LOCALES Y NORMATIVAS para eventuales prescripciones más estrictas en materia de
comprobaciones periódicas.
Controles generales y específicos:
Motor: realizar, según las indicaciones de la documentación del motor específico, el mantenimiento periódico. Si no se
especifica de otra forma, se aconseja sobre todo la sustitución de los cartuchos filtrantes (aceite y gasoil), la limpieza del filtro
del aire, la sustitución del aceite del motor máximo cada 300 horas de trabajo o bien, aunque no se haya alcanzado el
número de horas necesario, al menos una vez al año.
Hidráulica: seguir las prescripciones de la documentación específica.
Batería: comprobar cada semana el nivel de carga y del electrolito, si es necesario restaurar el nivel.
Antes de cualquier intervención, el operador cualificado tendrá que asegurarse que el cuarto esté correctamente ventilado y
conocer los riesgos producidos por las baterías de arranque de plomo:
Peligro por sustancias corrosivas.
Peligro de explosión.
Obligación de proteger los ojos.
Prohibición absoluta de llamas libres en las cercanías para evitar cualquier tipo de chispa.
Las baterías de plomo utilizadas para los motores tienen que controlarse periódicamente comprobando, al menos, que:
No estén presentes roturas o deformaciones en el monobloque o en la tapa de la batería, y/o pérdidas de líquido.
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Comprobar que las baterías estén limpias.
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Los polos no estén oxidados o dañados.
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Los bornes de los cables estén bien conectados con la batería.
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Si están presentes, desatornillar los tapones para que salga el gas eventualmente presente en el interior de la batería. Las
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baterías contienen ácido sulfúrico y emiten gas explosivo, especialmente durante la fase de recarga.
El nivel del electrolito tiene que estar siempre por encima de las placas metálicas internas de la batería (en algunos casos el
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nivel está indicado en el cuerpo externo de la batería), si es necesario, restaurar los niveles con agua demineralizada y
esperar que la formación de gas causada por el llenado termine (la operación tiene que realizarse con las baterías
desconectadas por personal experto e informado de los riesgos).
Si está disponible, comprobar la densidad del electrolito con el densímetro para evaluar el estado de carga de la batería,
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siguiendo las indicaciones del fabricante de la batería. Recordar de volver a colocar los tapones después de haber
efectuado la comprobación con el densímetro.
Comprobar la funcionalidad del cargador instalado en el interior del cuadro eléctrico de mando para el arranque de la
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motobomba a través de la lectura de los ledes de diagnosis. Consultar la hoja técnica específica de instrucciones.
Si las baterías permanecen durante largo tiempo sin ser recargadas (más de 6 meses) la operación de
ATENCIÓN
recarga podría resultar inútil y, en muchos casos, habrá que sustituirlas.
Durante la instalación de una batería, la conexión tiene que empezar siempre por el borne positivo.
Cuando se retira una batería, la desconexión tiene que empezar siempre por el borne de masa
negativa. Una batería se puede considerar cargada si su tensión en vacío es superior a 12,4 V. La
recarga de las baterías tiene que seguir restricciones específicas indicadas por el fabricante. Utilizar
cargadores de tensión constante de máx 15 V y con limitación de la corriente de carga.
Si la batería tiene una tensión en circuito abierto por debajo de 9 V, desconectar la batería de la
motobomba y recargarla con un cargador de carga rápida de gran capacidad. Respetar las
prescripciones del fabricante de la batería.
Las baterías contienen ácido sulfúrico (corrosivo) y emiten gas explosivo, especialmente durante la
recarga. Por lo tanto es indispensable mantener el cuarto ventilado y no fumar ni llevar o provocar de
ninguna forma llamas libres cerca de las baterías.
Cuadro eléctrico: los cuadros no necesitan intervenciones de mantenimiento específicas, sin embargo se aconseja
comprobar cada semana la eficiencia de los fusibles y cada año el estado de desgaste y limpieza de los relés. Está prohibido
abrir el cuadro eléctrico antes de desconectar la línea de alimentación. Cualquier modificación realizada en los cuadros, no
acordada con el fabricante, invalida automáticamente las garantías.
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